La cama forma parte del mueble imprescindible a instalar en la habitación de un recién nacido. Sin embargo, la elección de la ropa de cama del bebé debe hacerse entre modelos prácticos adaptados al niño. Una de las soluciones de ropa de cama adecuadas para un bebé es la cama convertible. Este tipo de muebles atrae a muchos padres por al menos 3 razones: su lado económico, su aspecto ecológico y el ahorro de espacio.
Ahorre dinero a largo plazo con una cama extensible
La cuna convertible acompaña al recién nacido desde el nacimiento hasta los primeros pasos. Evoluciona con el bebé, adaptándose a cada etapa de su crecimiento. Incluye elementos como pies desmontables y un sistema modular. Estos componentes le ofrecen la posibilidad de transformarse para satisfacer las necesidades actuales del niño. Además, sus barras de fijación son extensibles. Una cuna convertible de 140 cm de largo puede, con el tiempo, extenderse a 190 cm, o incluso a 200 cm para ajustarse al tamaño del niño. Tu bebé puede usarlo desde el nacimiento hasta los 18 meses o desde los 3 años hasta la adolescencia. La cuna evolutiva es, por tanto, una opción económica de ropa de cama, ya que ya no tendrás que pagar para comprar una cama nueva durante el crecimiento del niño. También es una buena compra para el planeta. Para tu hijo, si buscas una cuna convertible, seguro que la encuentras en tiendas de muebles de madera ecológicos.
Mobiliario sostenible: una opción ecológica para tu bebé
La cama convertible es conocida por su durabilidad. Este tipo de ropa de cama está diseñada con materiales ecológicos que le confieren una gran solidez y alta resistencia al paso del tiempo. Los fabricantes de camas extensibles utilizan principalmente la madera, un material natural, para construir muebles que respeten la salud de tu hijo. Por lo tanto, puede optar por un modelo ecológico para la cama de tu recién nacido. Ya sea roble, haya o ratán, la madera elegida procede de bosques ecogestionados. Clasificado entre los materiales MDF de generación ecológica, cuenta con la certificación PEFC. Esta madera ecológica se utiliza para hacer una cama de bebé de evolución saludable. Las pinturas a base de agua utilizada para realzar la decoración de la cama no contienen disolventes ni sustancias nocivas volátiles. El mobiliario diseñado, por tanto, respeta el medio ambiente y cumple con los requisitos eco-responsables. Al optar por una cama convertible ecológica para tu bebé, le estás ofreciendo un mobiliario que contribuye a su bienestar.
Ahorra espacio con una cuna convertible
El espacio en la habitación de su bebé se puede optimizar fácilmente con una cuna convertible. La cuna convertible es la mejor opción para una habitación pequeña porque ahorrará espacio. Con este tipo de cama puedes instalar en el dormitorio todos los complementos (cambiador, saco de dormir, armario, etc.) necesarios para el desarrollo de tu hijo. La cama adaptable ocupa poco espacio cuando se coloca cerca de la pared. También tiene varios compartimentos que se utilizarán para guardar las cosas del bebé. No importa el tamaño de la habitación, las dimensiones de la cama extensible están optimizadas para ofrecer una gran comodidad para el niño en su habitación. Para beneficiarse de un mueble práctico, puede optar por una cama de bebé convertible combinada. Compuesto por una cómoda, un cambiador y una cómoda cama, este modelo de cama convertible te permite liberar más espacio en el dormitorio para que tu hijo pueda moverse con total seguridad.