En la escuela, se anima a los niños a aprender poemas de memoria. Es una tarea que algunos dominan mejor que otros. Pero por suerte, con las técnicas adecuadas, cualquiera puede memorizar poesía. Aquí están nuestros ocho consejos y trucos para aprender un poema.
entrar condición y concentración
La memorización requiere toda la concentración del niño, por lo que tiene que hacerlo mantén la calma y descansa y debe ponerse en un ambiente propicio para el aprendizaje y la memorización. Por lo tanto, es necesario apagar la televisión, cortar la música, eliminar cualquier fuente de distracción, como un niño jugando cerca o una mascota. Una vez que se cumplen estas condiciones, el niño puede comenzar a memorizar.
Lee el poema en voz alta
Leer el poema en voz alta varias veces ayuda a usar la memoria auditiva. Esto es más efectivo con algunos niños que con otros, pero aun así ayuda a mantener bien el poema. Es más, repetir la lectura en voz alta ayuda a comprender la estructura del poema, así como sus ritmos y rimas, lo que favorece aún más la memorización.
reescribir y dibujar el poema
Para movilizar su memoria visual, el niño puede reescribir el poema varias veces, que profundiza su conocimiento de este texto y le permite memorizar cada sílaba, cada palabra. Puede también dibujar el poema, representar sus personajes, eventos, objetos o sentimientos que se le describen. Al hacerlo, el niño asimila el contenido y el trasfondo del poema, lo que facilita su memorización.
imitar y reproducir el poema
Si el poema cuenta una historia, como en las Fábulas de La Fontaine, el niño puede imitar el texto, reproducirlo, como un juego. Gracias a esta técnica, la memorización es más fácil, porque las palabras y los versos se asocian con gestos, expresiones faciales, lo que permite movilizar la memoria cinestésica.
Comprender el poema
Para aprenderse de memoria un poema o cualquier otro texto, es importante entender su significado y asimilar su lógica y su secuencia cronológica. Los textos y poemas a menudo cuentan una historia o describen sentimientos relacionados, preguntas. La comprensión del texto es, por lo tanto, esencial.. Es posible que el niño no comprenda todo el texto por sí mismo, por lo que puede necesitar explicaciones de su maestro o de sus padres.
Divide el poema en memorizarlo más fácilmente
Aprender todo el poema de cabo a rabo de una vez es muy difícil. Por lo tanto, debe dividirlo en verso o medio verso que el niño puede aprender por separado repitiéndolas varias veces, antes de volver a juntarlas poco a poco. Puede comenzar aprendiendo el primer verso por separado, luego, cuando lo haya memorizado bien, pasar al segundo verso. Una vez memorizado perfectamente este segundo verso, el niño intenta recitar los dos primeros versos seguidos. Si están bien asimilados, continúa con la tercera línea, la cuarta, hasta la última. Cuando haya memorizado el último verso, debe consolidar la memorización recitando el poema varias veces y en voz alta.
De regreso poesía varias veces
Para consolidar la memorización del poema, el niño debe volver varias veces durante varios días. Así que si tiene que recitar el poema el viernes siguiente, puede empezar a aprenderlo el lunes, y luego retomarlo todos los días recitando lo mejor que pueda hasta estar seguro de que lo tiene perfectamente memorizado. Esta técnica te permite anclar la poesía cada vez más en el cerebro, especialmente durante el sueño.
Compruebe que el el poema esta bien memorizado
Para detectar pasajes que el niño aún no ha memorizado por completo o errores que comete al recitar, el niño puede recitar frente a sus padres que sostienen el texto y corregirlo cuando se equivoca. Los padres también pueden escribir el poema que cubre ciertas palabras o versos y pedirle al niño que «llene los espacios en blanco». Estos métodos te permiten consolidar la memorización y asegurar que el poema se memoriza de forma duradera, gracias a la corrección de errores y lagunas.