La rehabilitación de viviendas es un proyecto que implica la ejecución de obras de muy diversa índole. Se lleva a cabo no solo para restaurar la residencia a su antigua belleza. La renovación también garantiza la solidez y durabilidad de la estructura. Dependiendo del tipo de operación a realizar, puede ser necesaria la intervención de un profesional. Pero ya sea que queramos contratar a una empresa especializada en la materia o que hagamos el trabajo nosotros mismos, hay ciertos errores que debemos evitar. ¡Descúbrelos en este artículo!
Abordar la obra sin un diagnóstico previo de la vivienda
Como toda obra de edificación, la rehabilitación parte necesariamente de un diagnóstico en profundidad del edificio. Esto se hace con el fin de estimar con precisión la extensión del trabajo. Este diagnóstico permite detectar cualquier problema que sea absolutamente necesario resolver. Como parte de su implementación, el especialista en reformas de viviendas también deberá tener en cuenta las necesidades y requisitos de su cliente. A tal fin, le hará llegar un presupuesto en el que le informará de los materiales imprescindibles para la realización de su proyecto. Este documento también le permitirá conocer el costo de este último. No obstante, siempre es recomendable considerar un pequeño margen de error.
Descuidar la planificación del trabajo.
Para el buen desarrollo de las obras, su ejecución debe hacerse según un determinado orden de prelación. Prioriza los trabajos más urgentes. En principio, aprehendemos la renovación de una casa con las obras mayores. Comenzaremos, por ejemplo, con la reparación de la cubierta, el derribo de paredes o tabiques, la mejora de las instalaciones eléctricas, etc. Además, primero será necesario cuidar las habitaciones de arriba antes de comenzar el trabajo en la planta baja. Esta es la clave del éxito del trabajo. No obstante, te recomendamos que contrates los servicios de esta empresa especializada en reformas de viviendas ubicada en Marsella.
Use herramientas de gama baja y materiales de bajo costo
Los proyectos de renovación de viviendas son relativamente costosos. Para ahorrar dinero y reducir los gastos que generan, tendemos a apostar por materiales de bajo coste. También decidimos hacer el trabajo nosotros mismos. Sin embargo, solo compramos herramientas de mala calidad. A pesar del pequeño ahorro realizado, el resultado final no será satisfactorio. Opta por productos de buena calidad. Garantizan tanto la resistencia como la durabilidad de la obra. Además, al tratar de ahorrar lo máximo posible, solo perderemos tiempo y dinero. Pronto, tendrán que ser reemplazados con los materiales en cuestión. Además, tenga en cuenta que para realizar un trabajo digno de un profesional, se recomienda el uso de equipos y herramientas profesionales.
No informarse sobre los trámites administrativos obligatorios
Antes de hacer nada, tómate el tiempo de informarte sobre los trámites administrativos a realizar. De hecho, trabajar sin autorización previa puede costarle muy caro. Si es así, se vería obligado a derribar todo lo que ha hecho. En la mayoría de los casos, se debe presentar una declaración previa de la obra en el ayuntamiento. Este es especialmente el caso cuando la ciudad en la que se ubica la vivienda está sujeta a un Plan Local de Urbanismo (PLU). En algunos casos, se requiere un permiso de construcción. Este es el caso cuando el trabajo de renovación implica la creación de una nueva abertura en la fachada. En cualquier caso, acude al departamento de urbanismo de tu ayuntamiento para que te mantengan informado de los pasos necesarios. También puedes ponerte en contacto con una empresa de reformas del hogar que, además de encargarse de tu obra, te ayudará a realizar los trámites administrativos.